Programa: Femicidio y Ni una menos - 27 mayo 2015

Femicidio y #Niunamenos

En el programa Contrastes y Contrapuntos de FM Santa María se abordó el jueves pasado el tema del femicidio y la movida del 3 de junio próximo, #Niunamenos. Con la presencia en estudios de Mirta Retamoso, fomentista e integrante de Mujeres del Noroeste por la Justicia Social,  Flaviana Maleplate, integrante de AJB y CTA Mercedes y Jorgelina Silva, coordinadora del CDR Mercedes. Vía telefónica se sumaron Patricia Barbieri del Departamento de Atención a la Víctima de Mercedes y la periodista Clarisa Altieri, una de las integrantes locales convocantes a la movilización del 3 de junio.

Los asesinatos de mujeres, los últimos hechos policiales donde están involucradas mujeres y jóvenes han generado en la sociedad un movimiento de repudio por estos hechos que tendrá su epicentro de manifestación el próximo miércoles 3 de junio en la Plaza de los Dos Congresos, en CABA para visibilizar esta problemática y perdir el compromiso de todos para poner un punto final.
En Mercedes la muerte de una joven estudiante, en el 2012, conmovió a la opinión pública y Mirta Retamoso fue una de las impulsoras de la concreción de la Comisaría de la Mujer que hace menos de dos meses se puso en funcionamiento en la ciudad: “la demanda se incrementó y las jóvenes se animan cada vez más a hacer la denuncia” indicó Retamoso tras reunión con la comisaria Zunino a cargo de la Comisaría de la Mujer Local.
Flaviana, miembro de la CD de la AJB Mercedes, comentó que desde la secretaría de género se suman a la convocatoria del 3 de junio aunque, señaló que “lamentablemente se están incrementando las muertes” porque la cosa “pasa por una cuestión ideológica: vivimos en una sociedad patriarcal donde la mujer es considerada como un objeto” y marcó el tratamiento que los medios le hacen a estas muertes “me llama la atención cómo muestran fotos que no favorecen a la imagen de esas víctimas” marcando un mensaje contradictorio con poco respeto a las mujeres y haciendo un juzgamiento de las víctimas y no de los victimarios.
En el Centro de Referencia local se puso en funcionamiento hace un tiempo el programa “Ellas hacen” y Jorgelina Silva comentaba que “uno de los requisitos para ingresar al programa era haber sufrido violencia de género” y de 180 beneficiarias solamente 10 habían padecido esto. Sin embargo en el marco del programa hay instancias de talleres vivenciales donde “surgió que el 80 por ciento de las chicas habían padecido violencia y que no lo habían denunciado”.
Hay una visibilización de esta problemática y todas las mujeres en la mesa coincidieron que hasta hace poco la violencia de género se lo tomaba como algo natural, incluso para las mismas víctimas. “En el taller de género del programa las mujeres pueden pensarse así mismas y compartir las experiencias vividas” comenta Jorgelina.
“La violencia de género pasa por el poder” señala Flaviana y destaca que las mujeres siempre apuntan al diálogo a mantener la familia a pesar de, inclusive su propio bienestar.

El Femicidio: una pandemia.

El Departamento de Atención a la Víctima es una de las instancias donde las mujeres pueden recurrir en la ciudad y donde trabaja Patricia Barbieri, psicóloga que integra el equipo junto a otras profesionales: 4 psicólogas en asistencia a niños y adultos, 2 en admisión, además de trabajadoras sociales y una asesora letrada.
El tema del femicidio “desgraciadamente es como una pandemia” destaca Barbieri y señala que esto “comienza a circular porque antes era de puerta adentro” y apunta al trabajo de los medios al darle difusión.
Según la licenciada hay ciertas características de las mujeres víctimas de violencia con condiciones psicológicas particulares y que viene en su historia familiar donde la mujer se pone en una posición “donde todos pueden victimizarme”, generalmente personas que ejercen poder. Hay “un brote de violencia en la sociedad” dice Barbieri “siempre lo hubo y recién se lo está hablando”.
En el Departamento de Atención a la Víctima hay un acompañamiento a las personas que sufren violencia y el momento crucial es el de la denuncia: “es el punto caramelo” describe Barbieri, donde se da intervención a la ley y la justicia. Ahí se “da la oportunidad de que se acomoden las cosas” indica Barbieri y agrega que cada vez más hay una conciencia de las mujeres de que lo que padecen no es natural. “Hay violencia física, psicológica y económica”  señala la psicóloga y las víctimas de violencia “creen que no pueden nada, en una situación de aislamiento y que no tienen derecho ni de hablar” y revertir esto es parte de la tarea de acompañamiento, destrabando la desvalorización que el violento ha operado sobre su víctima.
La Comisaría de la Mujer trabaja articuladamente con el Departamento porque parte del equipo trabaja allí” indica Barbieri y esto ha mejorado, en gran medida, los tiempos de respuesta a la demanda que “ha crecido muchísimo” y “las cosas fluyen y se dinamizan”.

#Ni una menos

Las redes sociales fueron el canal de contacto y difusión de esta movida que podría marcarse, tiene sus inicios por el  mes de marzo con una maratón de lecturas contra el femicido y a partir del caso de Chiara toma mayor impulso.
Clarisa Altieri es una de las periodistas locales que, como voz cantante del grupo de periodistas de la ciudad vienen promoviendo y convocando para la movida del 3 de junio.
“Hubo una conversación en twitter entre las periodistas” comenta Clarisa y a partir de ahí surge el hashtag #Niunamenos y también comienzan a aparecer aportes como de los dibujantes que se suman a esta movida.
La plaza de los Dos Congresos es el punto de reunión y es ahí porque “uno de los puntos es que se cumpla con la ley 26.485, conocida como la ley de Violencia contra las Mujeres, sancionada en el 2010” y agrega Clarisa que “hay provincias que no adhirieron a la misma”.
“Es una forma de interpelar a los políticos, a los que están en campaña, a los presidenciables” comenta Clarisa y destaca que la idea es que “se comprometan a decirle basta al femicidio”, buscando que se cumpla con la ley.
Para el próximo 3 de junio se está conformando un documento con cinco puntos y el propósito es “pasar de la foto a la firma”.


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